Papercut Massacre - Left 4 Dead

Era medianoche,
Y yo estaba en la calle,
Andando,
Sumergido en mis pensamientos.
De pronto, en la carretera,
Vi el cuerpo de una persona.
Me arrodille, comprobé su pulso,
Su corazón palpitaba,
Pero el joven estaba inconsciente.
Todo estaba muy oscuro,
Así que no conseguí distinguir quien era,
Pero me daba igual, debía ayudarle.
Lo cogí en brazos y me quede inmóvil por un momento.
Debía buscar ayuda, llevarlo a algún sitio…
Pero… ¿A dónde?
No había ningún hospital por la zona.
Y no podía regresar a casa,
Ya que de echo, me acababa de escapar de ella
Había discutido como nunca lo había echo con mi padre.
Tome una decisión rápida, no iba a volver,
Pero buscaría ayuda por la zona,
Me gire hacia el lado opuesto al que se encontraba mi casa.
Y comencé a andar en busca de ayuda.
Al cabo de lo que parecía una hora,
Seguía sin a ver encontrado rastro de ayuda,
Ni una casa, ni un lugar donde pudiera ser atendido.
Era una calurosa noche, y yo ya estaba agotado.
Me deje caer sobre el asfalto y me quede quieto un poco
Dejando suavemente el cuerpo.
Tenía los brazos entumecidos de tanto esfuerzo,
Pero no iba a rendirme debía continuar.
Recordé la discusión con mi padre,
Y la rabia que surgió de nuevo,
Saque fuerza de ella y aspire un soplo de aire,
Cuando nuevamente cogía el cuerpo de aquel joven en brazos
Y con un poco de sobreesfuerzo conseguí incorporarme
Y seguir caminando aunque con dificultad.
Seguí caminando por lo que parecía otras horas mas
Sin encontrar absolutamente nada.
Hasta que al fin me desplome en el suelo
Utilizando mis ultimas para intentar que el cuerpo del chico
No fuera dañado y cayera suavemente.
Me quede tirado en el suelo sin mirar a ningún lado durante un rato
Mientras recuperaba el aire.
Note que el empezaba a salir la luz,
Y me di cuenta de que estaba amaneciendo.
Me reincorpore un poco a la vez que alzaba la vista
Y justo delante me encontré con que había un hospital.
Había terminado en la entrada de un hospital,
Sonreí con fuerza, estaba eufórico y alegre.
Mire esperanzado al joven agarrándolo de nuevo
Pero me quede mudo nuevamente.
Ahora que había más luz pude ver el rostro y me pregunte:
“¿Que estoy haciendo… en mis propios brazos?”